martes, 7 de octubre de 2014

La Célula bajo el Microscopio

Para que una célula, como constituyente fundamental de la materia viva, se mantenga debe cumplir día a día con diversas funciones, y requiere así de ciertas estructuras básicas que se lo permitan. A continuación vamos a analizar cada una de esas estructuras básicas que posee una célula para lograr comprender las diferencias funcionales que presentan entre ellas y el funcionamiento de cada una.

La guardiana de la célula 
Todas las células poseen una membrana celular o plasmática (observa la imagen a la izquierda) que se encarga de permitir que la célula interactúe con el medio en el que se encuentra, además: 
  • Sirve de barrera de protección y delimitación del contenido celular. 
  • Regula la entrada y salida de materiales. 
  • Transmite señales e información entre células. 
  • Da lugar a compartimentos dentro de cada                                                                               célula.

El modelo de membrana celular adoptado hasta ahora es el propuesto en 1972 por S. J. Singer y G. L. Nicolson, llamado modelo del mosaico fluido. Si observas la figuras de arrriba y a la derecha, podrás notar que el modelo propone que la membrana celular está formada por una capa doble y fluida de moléculas de lípidos, en la cual hay proteínas asociadas. 

Al presentar estas características la membrana plasmática resulta selectivamente permeable, es decir, que según las necesidades celulares puede impedir el paso de una sustancia determinada, o en otros momentos puede permitir el paso de la misma. Más adelante en el texto trabajaremos en qué forma pueden pasar las sustancias a través de la membrana plasmática.



La Célula como Unidad de Vida

Una célula es capaz de cumplir todas las funciones necesarias de un ser vivo, nutrirse, crecer, reproducirse, responder a estímulos y diferenciarse. Para realizar sus funciones, la célula tiene en su interior estructuras fundamentales (organelos) y sustancias químicas que permiten su actividad. 


Los organelos celulares son estructuras con una organización especifica que poseen una función determinada en la célula. Entre 1838 y 1855, Matthias Schleiden, Theodor Schwann y Rudolf Virchow plantearon los fundamentos de la Teoría Celular, la cual sustenta la definición que hoy en día conocemos de célula. Basándonos en lo propuesto en la teoría celular, se considera a la célula como la unidad vital, estructural (anatómica), funcional (fisiológica) y genética de todo ser vivo. 
Se considera la unidad estructural ya que todos los seres vivos se encuentran formados por una o más células, desde los organismos más pequeños hasta los más grandes. Desde el organismo más diminuto conocido actualmente que es llamado Nanoarchaeum equitans, el cual mide 400 nanómetros de ancho y se encuentra emparentado con las bacterias, hasta el más grande que es la Armillaria ostoyae, un hongo conocido como “hongo de la miel” que llega a cubrir superficies aproximadas de 890 hectáreas. Además, la célula es también la unidad funcional ya que la base de todas las actividades que realiza un organismo está en los procesos que se cumplen dentro de sus células, ya sea que el organismo posea una o muchas células.

La Teoría Celular

La teoría celular es una parte fundamental y relevante de la Biología que explica la constitución de los seres vivos sobre la base de células, y el papel que éstas tienen en la constitución de la vida y en la descripción de las principales características de los seres vivos

ALGO DE HISTORIA DE LA TEORIA CELULAR

El concepto que se tenía de la célula ha variado considerablemente con el tiempo y con los medios de observación con que los investigadores han contado. La primera descripción de la estructura celular se debe al inglés Robert Hooke, que en su gran Macrographía, publicada en 1665, dio a conocer los resultados de sus observaciones realizadas sobre cortes muy finos de corcho y otros tejidos vegetales. 




El Microscopio

Es un instrumento que permite observar objetos que son demasiado pequeños para ser vistos a simple vista. El tipo más común y el primero que se inventó es el microscopio óptico. Se trata de un instrumento óptico que contiene dos o más lentes que permiten obtener una imagen aumentada del objeto y que funciona por refracción. La ciencia que investiga los objetos pequeños utilizando este instrumento se llama Microscopía.

Hay dos posturas en cuanto a la invención del microscopio, la que sostienen los italianos de que fue Galileo hacia 1610, y la otra que asegura que fue Zacharias Jansen (1590), en opinión de los holandeses. La palabra microscopio fue utilizada por primera vez por los componentes de la "Accademia dei Lincei" una sociedad científica a la que pertenecía Galileo y que publicaron un trabajo sobre la observación microscópica del aspecto de una abeja.

Sin embargo las primeras publicaciones importantes en el campo de la microscopia aparecen en 1660 y 1665 cuando Malpighi prueba la teoría de Harvey sobre la circulación sanguínea al observar al microscopio los capilares sanguíneos y Hooke publica su obra Micrographia.

A mediados del siglo XVII un comerciante holandés, Leenwenhoek, utilizando microscopios simples de fabricación propia describió por primera vez protozoos, bacterias, espermatozoides y glóbulos rojos.